Ubicado en Klevan, Ucrania. El Túnel del Amor es uno de los mayores ejemplos de que no es el hombre quien no tiene el control en el universo. Cuando la tierra toma el control, es imparable y maravillosa.
POR: Valeria Trosch
En el distrito Rivne Raion de la provincia de Rivne Oblast, al oeste de Ucrania, la naturaleza definitivamente tomó el control. En la ciudad de Klevan se alza maravilloso el Túnel del Amor. Se trata de una sección de vía ferroviaria ucraniana en los alrededores de ésta ciudad. Vale aclarar que se utiliza para transportar materiales a una procesadora de madera. Pero, la naturaleza construyó, entre ramas flores silvestres y sin reservas.
Antiguamente, tres trenes circulaban por ésta vía y transportaban materiales o personas desde las fábricas a la ciudad o viceversa. Con el paso del tiempo, el uso se redujo, y dio pie a que el follaje del bosque creciera alrededor. En la actualidad, parte de la vía sigue en funcionamiento. Con un tren de ruta privada que cumple el mismo cometido de antaño. Y su ruidoso cantar le indica a quienes visitan el Túnel del Amor que se aparten del camino.
Es importante saber que, el tren conecta la ciudad de Klevan, cuya población no supera los 8000 habitantes, con la fábrica de procesado. Parte de la estación principal de ferrocarril tres veces al día.
Aunque solía ser una simple vía, la naturaleza construyó un pasadizo, a medida de las máquinas que lo circulan. Y lo hizo hasta convertirlo en uno de los lugares más románticos del mundo. Es diariamente visitado por un gran número de personas, en su mayoría parejas.
El camino rodeado de vegetación que transforma el camino en un túnel alcanza un tercio de toda la vía. Además, sus colores cambian en el transcurso del día. Mientras el sol está en la cúspide, los tonos verdosos resaltan con brillo. Pero, al atardecer el paisaje se convierte en una entrada mágica a un bosque misterioso lleno de tonos dorados. Sí, una construcción que sabe cómo aprovechar la luz y cautivar fotógrafos.
Como si esta construcción de la naturaleza no fuera suficiente, los alrededores de las vías muestran algunos de los paisajes más sorprendentes, de colores vibrantes y formas originales.
El Túnel del Amor también cuenta una historia
Existe una leyenda urbana en Ucrania que afirma que si dos personas, sinceras en su amor, cruzan el túnel tomadas de la mano, sus deseos se harán realidad. Tal vez, esta sea la razón por la que la mayoría de los visitantes que rondan la vía son parejas de diferentes partes del mundo. Aunque es incomprobable si realmente sus deseos se cumplen, es innegable que el recorrido es romántico y fuera de lo común.
Klevan, la ciudad del Túnel del Amor
Un asentamiento en el territorio actual de Klevan se fundó por primera vez a principios del siglo XII. A orillas del río Stubla, un afluente del Horyn. En ese momento, tomó el nombre de Kolyvan o Kolivan. Mientras que la primera mención escrita de Klevan apareció en 1458 y en 1940 la ciudad adquirió el estatus de asentamiento de tipo urbano.
Se accede a Klevan por las carreteras T1817 y H22, y se encuentra a 28,3 kilómetros al noroeste de Rivne y a 50,4 al sureste de Lutsk a lo largo del H22.
Además de la fabulosa arquitectura natural del Túnel del Amor, también se pueden visitar las ruinas del castillo de Klevan. El mismo comenzó a construirse en 1475 y se completó en 1561. También alberga la Iglesia de la Anunciación con un campanario que data de 1630. Así como la Iglesia de la Natividad, que fue construida en 1777.