Riviera Maya y los mejores cenotes para visitar

Riviera Maya y los mejores cenotes para visitar

Bucear en aguas translúcidas, entre misteriosas formas y en compañía de fauna multicolor. Es lo que ofrece Riviera Maya, sobre todo en algunos de sus más fantásticos cenotes. 

Esta zona turística de México, que está situada en la costa del mar Caribe, se extiende a lo largo del litoral unos 210 kilómetros. Riviera Maya cuenta con alrededor de 405 hoteles de clase internacional, cinco estrellas y otras categorías. Pero no ofrece sólo paisajes paradisíacos y playas hermosas.

Se pueden realizar diversas actividades como visitas a museos y sitios arqueológicos. También se compone de bosques semitropical seco. Además, el litoral ofrece magníficas gamas de arena entrecruzadas por rocas coralinas. El agua del mar del Caribe es transparente y turquesa, y se pueden ver peces de todos los colores.

Riviera Maya y los mejores cenotes para visitarPero, sin dudas, una de las actividades más aventureras es visitar cenotes. Ya que la región está formada geológicamente por una inmensa meseta caliza. Esta roca, tiene la particularidad de ser permeable, numerosas redes de grutas y galerías subterráneas se crearon con el paso del tiempo. Debido a que la capa freática era bastante elevada, las grutas se llenaron con agua para formar lo que se llama en México cenotes. Muchos de ellos son accesibles al público para nadar, bucear o espeleobuceo.

De hecho, su nombre deriva de la palabra maya “dzonoot”, que literalmente significa “hoyo de agua”. Asimismo, dependiendo de su forma, se pueden distinguir tres tipos de cenotes: cenotes abiertos, cenotes semiabiertos y cenotes cerrados. Los primeros pueden parecen lagos sin más, los segundos cuevas con alguna entrada de luz y los últimos grutas subterráneas totalmente cerradas.

Los tres mejores cenotes de Riviera Maya

Zacil-Ha, de Tulum

A 8 kilómetros de Tulum, el cenote Zacil-Ha representa una experiencia idónea para compartir en familia. Sus aguas son transparentes, de tonalidades jade, y registran sólo tres metros de profundidad.

Además de los encantos naturales, alrededor de esta formación todo está ideado para el disfrute de grandes y chicos. Una de las ventajas que la caracteriza es que sus bordes están revestidos con madera para facilitar la circulación.

En las cercanías de la estructura, también fueron emplazadas dos piscinas que resultan adecuadas para el caso de que se presenten muchos visitantes. Por cierto, esto ocurre raramente, ya que la calma es uno de los distintivos del lugar.

Otro detalle único, es que cualquier persona que se asome al cenote puede ver rápidamente un sinfín de peces coloridos sin necesidad de sumergirse.

En cambio, para los que sí buscan adentrarse en las profundidades, está disponible la propuesta de bucear desde una cueva hacia la cámara de Las Lágrimas, reconocida por sus curiosas estalactitas con forma de gotas.

Dos Ojos

Se encuentra en el corazón de la Riviera Maya, sobre la ruta entre Tulum y Playa del Carmen. Esta estructura es parte del parque homónimo, que también alberga los cenotes Jaguar, Nicte Ha, El Pit y Los Monos.

La proximidad entre las formaciones convierte a este espacio en una de las propuestas favoritas. Su ubicación privilegiada también es compartida por la hotelería que distingue a la región.

Este cenote incluye dos cuerpos de aguas translúcidas, comunicados por cavernas subterráneas. Ambos integran el sistema Sac Actun, que con sus 370 kilómetros de longitud conforma la cueva inundada más grande del mundo.

Considerado como un verdadero río subterráneo, Sac Actun resulta accesible gracias a los tours ofrecidos desde la costa caribeña. Justamente, para recorrerlo, una de las opciones más completas es la experiencia “Signature”, que es exclusiva de UNICO 20° 87 Hotel Riviera Maya.

Con respecto a Dos Ojos, cabe destacar que, desde su entrada, se puede visualizar un extraño juego de luces creado naturalmente por las características del terreno.

Para quienes prefieren ir más allá, en búsqueda del espíritu aventurero, la propuesta cuenta con dos rutas de buceo: Barbie, un recorrido relativamente accesible, iluminado y repleto de estalactitas; y La Cueva del Murciélago, similar al primero, aunque más corto y de menor luminosidad.

Chaak Tun, de Playa del Carmen

Su nombre, en castellano, significa “lluvia de piedras”. Se encuentra a pocos kilómetros de Playa del Carmen. Para acceder a este cuerpo, se debe recorrer un paseo que atraviesa parte de la Selva Maya, un trayecto de un atractivo único.

Esta estructura destaca por la claridad de sus aguas, que permiten observar estalactitas, estalagmitas y llamativas columnas. Las acompaña un universo de animales acuáticos, como variedades de peces gato y diminutos camarones.

Como parte de Sac Actun, cuenta con un recorrido de tres etapas que inicia en la caverna Pixan. Allí, donde reina la serenidad, permanece oculta una réplica de la Virgen de Guadalupe. La posibilidad de hallarla suma otra aventura singular.

Riviera Maya y los mejores cenotes para visitarEn el segundo nivel, se ingresa a Xibalbá, una cueva utilizada por los mayas para realizar distintos rituales. Desde el acceso, la atmósfera de este espacio resulta excepcional. Más adelante, cientos de estalactitas le añaden otra capa de misterio a su carácter onírico.

Luego, aparece Aluxes, una cueva reconocida por la tranquilidad de sus ambientes. Finalmente, al salir, corona esta experiencia la posibilidad de probar diversos platos típicos en los locales gastronómicos situados alrededor.